Renacer
Desperté en el hospital general en la parte de urgencias, no recuerdo nada antes de hoy, los doctores me han dicho que intenté quitarme la vida con pastillas, drogas y alcohol.
Mi mamá no tarda en llegar, le avisaron de inmediato cuando me ingresaron, le habían dicho que había muerto, pues clínicamente duré así una hora. Nadie sabe por qué desperté o cómo fue que me devolvieron la vida.
Me han venido a visitar más de veinte doctores, pocos son jóvenes, la mayoría son personas mayores de 50 y me han hecho todo tipo de estudios y pruebas, cada que me observan por primera vez veo cómo abren más los ojos.
Mi mamá llegó corriendo y cuando vi que iba a entrar a mi cuarto varios enfermeros la detuvieron, no pude evitar ver su rostro horrorizado, ¿Habrá cambiado en algo mi aspecto?, no puedo saberlo, sigo conectada por todos lados y apenas y puedo mover las manos.
Después de unos momentos mamá entra con enfermeros y doctores, sea cual sea mi aspecto me abraza con fuerza y besa mi frente, después pide que nos den un momento.
Me ha hecho miles de preguntas de las cuales no puedo responder ninguna, a decir verdad no recuerdo ni mi nombre a no ser porque los doctores lo repiten junto con mi fecha de nacimiento. Mi madre solo la reconozco porque me dijeron que vendría y en cuanto vi su rostro sentí paz y seguridad.
Me ha dicho que descanse y después de lograr cerrar los ojos por unos momentos me despierta un cántico extraño y espeluznante, abro los ojos y el cuarto se encuentra oscuro, hay algunas veladoras y el olor a copal me llega fuertemente.
Esto ya no parece el cuarto del hospital y tampoco estoy en una cama conectada a varios aparatos. Logro ponerme de pie y a mi alrededor hay varias personas, todas están hincadas y cantan enérgicamente palabras que no entiendo. Entre ellas logro reconocer a quien supuestamente es mi madre, está vestida de negro de pies a cabeza con flores de colores tejidas en el pecho.
Al verme despierta y de pie, sonríe maliciosamente y sus ojos se tornan rojo, su aspecto no es como el de hace rato, en lugar de paz ahora siento miedo.
Alza sus manos para que me encuentre con ella y yo, sin toda la fuerza que poseo no veo de otra más que hacer lo que me pide.
Al momento de abrazarla siento cómo me apuñala por la espalda, 2, 3, 4 veces me atraviesa mientras sigue cantando fuertemente.
Quería gritar pero de mi boca no sale ningún sonido, solo siento las últimas lágrimas recorrer mi rostro al caer.
Acerca su boca a mi oído y me dice “Para renacer, debes morir primero”.
Despierto de golpe como si el aire me faltara y me encuentro de nuevo en el hospital. Mi madre está dormida en una silla a lado de mi cama. Todo parece tan confuso, me duele todo el cuerpo y me pesa horriblemente la cabeza.
Intento cerrar los ojos pero no logro dormir, mantengo los ojos entrecerrados y cuando volteo a ver a mi madre ahí está, sonriendo con los ojos rojos, feliz.